martes, 29 de diciembre de 2015

EL BUENO, EL MALO Y EL RARO (Jee-Woon Kim, 2008)

the good, the bad and the weird

Ambientada en la Manchuria de los años 40, "El bueno, el malo y el raro" (ya desde el título nos indican por dónde irán los tiros, nunca mejor dicho), nos cuenta la clásica historia western (oriental-spaguetti-western?) donde tres piezas de cuidado se enfrentan a la carrera por conseguir un mapa del tesoro y salir vivos de ataques mutuos y de los de una miriada de bandidos chinos y el ejército japonés (ríete de Rambo).

La peli tiene ínfulas y cuidado de gran super-producción jolgoriwoodllera: una impecable fotografía y ambientación muy trabajada (los dos aspectos que más me han gustado, sin duda -, sobre todo por lo poco habitual de la localización). Se nota que han invertido pasta en el asunto, porque todo lo que se nos muestra entra muy bien por los ojos, resulta muy agradable de ver (al menos, así me ha resultado a mí).

Si la ves como simple película de entretenimiento, con expectativas tirando a bajas, puede que consiga entretenerte de forma estable durante sus 2 horejas y cuarto. La historia no te sorprenderá, pero tiene bastante acción constante, con algún que otro toque de humor (más bien sosete en su mayoría, quedándose en "simpática"); a veces esta acción resulta trepidante, y en ocasiones se nota que no supieron tratarla adecuadamente (esa oportunidad perdida de la persecución en el desierto...). En resumen, un ritmo un tanto irregular, con momentos concretos a destacar. Yo me la he visto de tres tacadas, así que no sé si resultará demasiado pesada de golpe.

Lo dicho: si buscas simple entretenimiento, y un aspecto visual cuidado, este western atípico puede que te salve la noche.



2 comentarios:

David Gómez Hidalgo dijo...

Con ese título ya merece la pena verla, jajajaja. Que grande eres buscando peli de esas de coleccionista.
Aprovecho para desearte una buena entrada de año.
Un abrazo,

Luis Bermer dijo...

Jeje, ya sabes: lo mejor para los mejores :D
Felices fiestas también para ti, David.
¡¡Un abrazo!!